Vivimos en sociedades muy complejas y, además, en tiempos de un cierto desconcierto. Los Nuevos Movimientos Sociales (NMS) reflejan la muy alta complejidad humana de hoy. Tienen múltiples aspectos políticos y culturales, aúnan cuestiones ideológicas con anhelos y malestares emergentes, suman preocupaciones humanístico-existencialistas con intereses e incluso egoísmos.