
Como algún perverso programa de radio, en lugar de atender al saber, la verdad, la erudición, el conocimiento... se atreve a mirar su ausencia, su privación, su negación, su antimateria... Pensar o discutir sobre la ignorancia, el desconocimiento, la incultura... y otras realidades que no suelen caber en una biblioteca que se precie. Y que sin embargo, se analizan en ese libro (La sociedad de la ignorancia) que tiene el atrevimiento de hablar de lo que normalmente se calla.