A pesar de ser hijos de la debilidad existencial y del resentimiento, Nietzsche destaca la capacidad de dominio y de fanática fe que los nihilistas obtienen de la construcción de un “mundo verdadero”, con valores “superiores” y aupado en un Dios transcendente. Afianzados sobre esa poderosísima y milenaria dialéctica pueden, por muy débil que cada uno sea individualmente, usurpar la fuerza de aquello en lo creen fanáticamente. Así superan la debilidad que le es intrínseca y convencidos de tener tras de sí a lo supremo, absoluto y divino, se sienten en posesión de un poder también supremo, absoluto y divino.
Deleuze considera que Hegel fue simplemente el más perfecto ejecutor de esa dialéctica nihilista. Por el contrario Deleuze (1971: 18) proclama que “El ‘sí’ de Nietzsche se opone al ‘no’ dialéctico; la afirmación a la negación dialéctica; la diferencia a la contradicción dialéctica; la alegría, el placer, al trabajo dialéctico; la ligereza, la danza a la pesadez dialéctica; la hermosa irresponsabilidad a las responsabilidades dialécticas.”
Pero durante más de dos milenios, la dialéctica convertida -según Nietzsche- una fe llevada hasta el fanatismo permitió que la rebelión de los débiles y resentidos nihilistas inconscientes llevara a cabo la más terrible, profunda y peligrosa transvaloración de todos los tiempos. Sólo así consiguieron romper el maravilloso equilibrio apolíneo-dionisíaco de la cosmovisión presocrática, de los valores heroicos homéricos y de la Tragedia Ática que durante siglos inmunizó a los griegos del nihilismo.
Pero una vez rota esa cosmovisión arcaica griega, el nihilismo fue avanzando y -precisamente por ser inconsciente- convirtió en enemigos muy temibles a un rebaño de resentidos -dice Nietzsche- que reaccionan a su propia debilidad y logran convertirla en una muy poderosa voluntad de dominio.
A pesar de las importantes diferencias existentes entre las religiones, las metafísicas y los ideales político-técnicos modernos, en todos los casos coinciden en dejar impensado su fondo nihilista común. Pues comparten el pavor ante la terribilidad de la existencia y sacrifican la vida ahora y aquí ante el altar de las distintas versiones abstractas y transcendentes del “mundo verdadero”. Ese temor y temblor bloqueaba de mil maneras el advenimiento consciente del nihilismo y escondía sus altos costes existenciales.
Pues Nietzsche recuerda que la vida no se puede vivir a cuenta de otro o en abstracto, sino que es una experiencia absolutamente concreta, singular e individual. Por eso negarla en favor de algo transcendente es caer en un nihilismo muy gratificante -en la medida que es inconsciente- pero que, ante la inevitabilidad de advenir consciente, se convierte en la versión más angustiante y terrible de lo que Kierkegaard expresó muy certeramente como “temor y temblor”.
Este post está basado en el artículo “¿Cómo Nietzsche supera el nihilismo y deviene antinihilista?” de G. Mayos del libro Nietzsche actual. Reflexiones ineludibles sobre un clásico intempestivo, Pablo Lazo y Paula Arizmendi (coords.), Ciudad de México: Universidad Iberoamericana, 2021, 284 pp. ISBN: 978-607-417-822-7. Una brevísima reseña.
Índice: Prefacio. Un Nietzsche para el siglo XXI, Germán Cano; Prólogo. Nietzsche actual. Reflexiones ineludibles sobre un clásico intempestivo, Pablo Lazo y Paula Arizmendi.
PRIMERA SECCIÓN. NIETZSCHE HOY. APUNTES SOBRE UNA FILOSOFÍA Y UN ESTILO INTEMPESTIVO. Nietzsche’s Kitchen. Prolegómenos para una filosofia de la alimentación, Ángel O. Álvarez Solís; Breve nota sobre el estilo aforístico de F. Nietzsche, Carlos Mendiola Mejía; Verdad, estilo y delirio en la escritura de Nietzsche. Reflexiones a partir de Sobre verdad y mentira en sentido extramoral; La pasión del conocimiento, Crescenciano Grave; ¿Cómo Nietzsche supera el nihilismo y deviene antinihilista?, Gonçal Mayos.
SEGUNDA SECCIÓN. NIETZSCHE Y LOS INTERLOCUTORES DEL (¿AYER?) MAÑANA. Deleuze, lector de Nietzsche, José Ezcurdia; Preplatónicos y la verdad de los milesios: Nietzsche und die Nullzeit der Philosophie, Panagiotis Deligianakis; Así habló Maquiavelo: Potencia agónica y política, desviada en tiempos de pasiones tristes, Dante A. Aragón Moreno; Nuevos sentidos políticos a partir de Nietzsche, Silvia L. Gil; Entre el velo y la pasión del conocimiento. Nietzsche como pensador de transición, Germán Cano; Bibliografía; Autores.
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